Orientado a conectar teoría y aplicación profesional desde los fundamentos del derecho constitucional y el análisis del ordenamiento para comprender la organización del Estado y su legitimidad. A partir de las fuentes del Derecho, la Constitución y los tratados, el estudiante desarrolla competencias analíticas, argumentación jurídica y manejo de información normativa y jurisprudencial. Asimismo, se estudian derechos y libertades, sus garantías y límites, junto con el funcionamiento de las instituciones públicas (Cortes, Gobierno, Poder Judicial y Tribunal Constitucional), reforzando pensamiento crítico, precisión terminológica y comunicación académica. De este modo, la asignatura aporta aplicabilidad profesional a la criminología en ámbitos de seguridad, gestión pública y cumplimiento normativo, favoreciendo la toma de decisiones con criterio y respeto al ordenamiento jurídico.

Partiendo de marcos conceptuales actualizados, ofrece una visión integral sobre la estructura, la dirección y el comportamiento de las organizaciones. A través del estudio de las funciones empresariales —producción, marketing, finanzas y recursos humanos—, se analizan los procesos de toma de decisiones, liderazgo, comunicación y gestión del cambio. El enfoque fomenta la comprensión del comportamiento organizativo y de los factores que determinan la eficacia institucional, vinculando los conocimientos de administración con la interpretación de dinámicas sociales o incluso delictivas en entornos corporativos. De este modo, el estudiante desarrolla competencias analíticas y de planificación aplicables a la criminología, la gestión de equipos y la resolución ética de conflictos en contextos públicos y privados.

Partiendo de una mirada histórica y crítica, el recorrido examina cómo se han configurado la criminalidad y el orden público en España desde la Antigüedad hasta la actualidad, atendiendo a las causas sociales, culturales y jurídicas del delito. El análisis de las formas de castigo, persecución y control permite entender la evolución del sistema penal y de las instituciones dedicadas a garantizar la seguridad. A través del trabajo con fuentes históricas y textos normativos, el estudiante fortalece competencias analíticas y de interpretación, esenciales para relacionar los procesos del pasado con los desafíos contemporáneos de la criminología. De este modo, la asignatura fomenta una comprensión integral de la relación entre justicia, poder y sociedad.

Con un enfoque aplicado y multidisciplinar, este itinerario introduce los fundamentos de la economía y su relación con la criminología, explicando cómo los incentivos y la asignación de recursos condicionan decisiones individuales y colectivas. A través de Principios de economía, el alumnado comprende los mecanismos de la microeconomía —oferta, demanda, comportamiento del consumidor y estructura de mercados— y los equilibrios de la macroeconomía, como el empleo, la inflación o el sistema financiero. El aprendizaje combina modelos teóricos y análisis práctico, reforzando competencias de razonamiento crítico, interpretación de datos y aplicación de herramientas económicas a contextos sociales, institucionales y de política pública vinculados al ámbito criminológico.

Desde una mirada crítica e integradora, ofrece un recorrido por la evolución del pensamiento criminológico y los enfoques que explican la génesis y reproducción de la conducta delictiva, conectando el análisis del delincuente con el estudio del delito, la víctima y el control social. En este sentido, promueve competencias transversales de análisis y síntesis de información, formulación de hipótesis, razonamiento crítico, trabajo en equipo y uso de TIC, junto con capacidades específicas como el dominio de teorías criminológicas, la comprensión del contexto social del crimen, el conocimiento de tipologías delictivas y el manejo de fuentes jurídicas aplicadas a la práctica profesional. Asimismo, articula contenidos clave —Escuela Clásica, teorías biológicas, ecológicas (Chicago), asociación diferencial, anomia, subculturas delictivas, control y etiquetamiento, además de la Criminología Crítica, enfoques integrados y nuevas perspectivas— para cimentar una comprensión empírica del fenómeno delictivo y favorecer el diseño de modelos de prevención y programas de tratamiento, impulsando una participación activa del estudiante en el análisis de casos y la resolución de prácticas a lo largo del semestre.

Con un enfoque formativo esencial dentro del Grado en Criminología, ofrece las bases para comprender los fenómenos sociales y de criminalidad en su contexto general. Permite al alumnado familiarizarse con las principales corrientes teóricas y métodos de investigación sociológica, y con los debates científicos más relevantes sobre la estructura, el cambio y el conflicto social. A lo largo de la asignatura se estudian los fundamentos de lo social —interacción, cultura, socialización y estructura—, las formas de desigualdad y estratificación —clase, etnia, género y movilidad—, así como los procesos de cambio y globalización que configuran la sociedad contemporánea. Se fomenta el desarrollo de competencias como la capacidad de análisis y síntesis, la formulación de hipótesis, el razonamiento crítico y el trabajo colaborativo, aplicables a la práctica profesional criminológica. La metodología combina clases magistrales, tutorías y trabajos individuales y en grupo, con una evaluación continua basada en exámenes (40%), trabajos colectivos e individuales (50%) y actividades complementarias (10%), garantizando un aprendizaje riguroso y autónomo.

Proporciona una comprensión profunda del papel estratégico que desempeñan la información, el conocimiento y la inteligencia en la prevención y lucha contra la criminalidad organizada. El estudiantado aprende a identificar, gestionar y transformar los datos en conocimiento útil para la toma de decisiones, explorando las disciplinas de la gestión del conocimiento, la inteligencia y la prospectiva como herramientas esenciales para las organizaciones públicas y privadas. Se analizan los sistemas de gestión de información, los procesos de innovación y aprendizaje organizativo, así como las técnicas de análisis prospectivo orientadas a la anticipación de riesgos y oportunidades. La asignatura impulsa competencias en análisis de datos, manejo de fuentes, pensamiento crítico y trabajo colaborativo, aplicadas al ámbito criminológico. La metodología combina clases teóricas, debates y estudios de caso con una evaluación continua basada en exámenes (50%) y actividades prácticas y trabajos individuales o grupales (50%), promoviendo un aprendizaje autónomo y orientado a la práctica profesional.

Profundiza en el estudio del lenguaje jurídico y de la lingüística forense, capacitando al alumnado para comprender, analizar y redactar con precisión textos propios del ámbito judicial y legal. A través de un enfoque práctico, se trabajan las características del lenguaje forense como lenguaje de especialidad, las estructuras y técnicas de redacción profesional, la cortesía lingüística y la argumentación. En su segunda parte, introduce los fundamentos de la lingüística forense, disciplina que examina la relación entre lenguaje y ley, abordando la identificación de ilícitos lingüísticos como el plagio o la calumnia, así como el análisis probatorio mediante técnicas de atribución de autoría, perfilado y fonética forense. Se desarrollan competencias de análisis crítico, comunicación escrita y verbal, trabajo en equipo y aplicación del conocimiento lingüístico a contextos jurídicos. La asignatura combina teoría y práctica con una evaluación continua basada en exámenes (50%), prácticas en el aula (40%) y actividades complementarias (10%), fomentando un aprendizaje riguroso y aplicado.

Ofrece una introducción esencial al Derecho civil y sus fundamentos, proporcionando al alumnado la base jurídica necesaria para comprender la protección de la persona y sus derechos en el marco de la Criminología. Se analizan las fuentes del Derecho, la aplicación e interpretación de las normas y los efectos jurídicos del tiempo, junto con el estudio de la persona, la capacidad, la nacionalidad, el estado civil y los derechos de la personalidad. La asignatura dedica especial atención a los derechos al honor, la intimidad, la imagen y la protección de datos, con énfasis en los desafíos que plantea el entorno digital y las nuevas tecnologías. Asimismo, aborda cuestiones relativas a la responsabilidad civil y a las relaciones familiares y sucesorias. El aprendizaje promueve competencias de análisis jurídico, argumentación, interpretación normativa y pensamiento crítico, fundamentales para el ejercicio profesional en Criminología. La evaluación combina teoría y práctica mediante exámenes (60%) y actividades aplicadas y trabajos (40%), favoreciendo una formación sólida y aplicada al contexto jurídico actual.

Permite comprender el papel de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) en el ámbito jurídico y criminológico, fomentando el uso responsable, seguro y estratégico de la información digital. El alumnado adquiere competencias para buscar, analizar y gestionar información criminológica mediante herramientas informáticas, bases de datos y recursos en línea, así como para emplear aplicaciones ofimáticas y sistemas de administración electrónica. Se abordan temas como Internet en la cuarta revolución industrial, identidad digital, protección de datos, inteligencia artificial, seguridad informática y informática forense, promoviendo un enfoque crítico sobre los retos tecnológicos del Derecho y la Criminología. La materia potencia la alfabetización digital, la gestión del dato y la comunicación en entornos virtuales, preparando al estudiante para entornos multidisciplinares. La evaluación combina examen práctico (40%) y actividades aplicadas, individuales y grupales (60%), incluyendo una exposición oral obligatoria, asegurando un aprendizaje activo, ético y orientado a la práctica profesional.

Facilita la comprensión y el análisis de los diversos fenómenos criminales desde una perspectiva jurídica, social y criminológica, capacitando al alumnado para identificar, clasificar y describir los principales tipos de delincuencia contemporánea. La materia aborda el estudio sistemático de la criminalidad violenta, sexual, organizada, juvenil, medioambiental y cibernética, así como de fenómenos específicos como el terrorismo, la violencia de género, la violencia doméstica y el discurso del odio. A través del trabajo con casos prácticos, debates y análisis de legislación y jurisprudencia, se promueve una visión crítica y aplicada del delito como hecho social complejo. Se refuerzan competencias esenciales como la capacidad analítica, la investigación, el razonamiento crítico y la interpretación de datos criminológicos. La metodología combina clases teóricas y prácticas con evaluación continua, orientada a la aplicación de los conocimientos teóricos en contextos profesionales vinculados a la seguridad, la prevención y la justicia penal.

Proporciona las bases teóricas y metodológicas necesarias para comprender y aplicar el método científico en el estudio de los fenómenos criminales. Permite al alumnado diseñar, desarrollar y presentar proyectos de investigación criminológica, integrando la formulación de hipótesis, la selección de métodos y la gestión de fuentes de información y datos. A lo largo del curso se analizan los tipos de conocimiento científico, la naturaleza empírica de la Criminología, las técnicas de recolección y análisis de datos, la ética en la investigación y las aplicaciones profesionales de la investigación en distintos ámbitos —criminal, pericial o de inteligencia—. El enfoque fomenta la capacidad crítica, la argumentación científica y el trabajo en equipo, preparando al estudiante para la práctica investigadora y académica. La evaluación continua pondera pruebas teóricas (50%), trabajos y participación (30%) y actividades complementarias (20%), garantizando un aprendizaje aplicado y riguroso orientado a la excelencia científica.

Profundiza en el análisis de los procesos sociales que definen y regulan la desviación, entendida como construcción cultural y normativa, esencial para comprender los fenómenos criminales. A través de un enfoque crítico y comparado, el alumnado examina las principales teorías sociológicas —desde la anomia y el control social hasta el interaccionismo simbólico y la criminología crítica— y su aplicación al estudio de las conductas desviadas, el estigma y los mecanismos de exclusión. La materia aborda también la relación entre desviación y desigualdades vinculadas a clase, género, etnicidad, edad o salud mental, así como las nuevas formas de control y resistencia en la era digital y global. Se fomenta la capacidad para interpretar los fenómenos sociales desde una perspectiva interdisciplinar y desarrollar un pensamiento analítico orientado a la práctica criminológica. La evaluación combina trabajo individual (50%), pruebas teóricas (40%) y actividades prácticas y seminarios (10%), promoviendo un aprendizaje crítico y participativo.

Proporciona una visión integral de los procesos psicológicos básicos que explican el comportamiento humano y su relación con los fenómenos criminológicos. El alumnado adquiere conocimientos sobre los principales paradigmas y teorías psicológicas, la interacción entre persona y ambiente y los factores cognitivos, emocionales y sociales que influyen en la conducta. Se estudian procesos como el aprendizaje, la memoria, la percepción, la motivación, la emoción, la personalidad y las actitudes, con aplicaciones directas al análisis del delito, la violencia y la victimización. Además, se abordan temas de psicología social y grupal, explorando la influencia de los grupos, los prejuicios y la obediencia en el comportamiento delictivo. La materia promueve competencias de observación, análisis crítico, trabajo en equipo y comunicación, esenciales para la práctica criminológica. La evaluación continua pondera exámenes y memorias (60%), prácticas y trabajos (30%) y actividades complementarias (10%), garantizando una formación aplicada y coherente con el perfil profesional del criminólogo.

Ofrece una visión integral de las políticas, estrategias y estructuras de seguridad en los ámbitos nacional e internacional, abordando sus fundamentos teóricos, institucionales y prácticos desde una perspectiva multidisciplinar. El alumnado analiza las dimensiones política, social y tecnológica de la seguridad, junto con los principales modelos de gestión y prevención de riesgos aplicados en sociedades globalizadas. La materia examina temas clave como la seguridad nacional, la ciberseguridad, el terrorismo, la criminalidad transnacional y la protección de infraestructuras críticas, además de la cultura de seguridad y defensa como base de la seguridad democrática. Se promueven competencias en análisis estratégico, pensamiento crítico, resolución de problemas y trabajo en equipo, esenciales para la gestión profesional en el ámbito criminológico y de la seguridad pública o privada. La evaluación combina exámenes parciales (80%) y trabajos y casos prácticos (20%), asegurando una formación aplicada y orientada a la toma de decisiones.

Permite aplicar los conocimientos psicológicos y psicosociales al estudio de la conducta delictiva, la víctima y los contextos en los que se produce el crimen. A partir de los fundamentos adquiridos en “Introducción a la Psicología”, el alumnado analiza los determinantes individuales y situacionales del delito, los procesos de aprendizaje de la violencia y los factores de riesgo y protección implicados. Se abordan áreas clave como la psicología forense, la psicología del testimonio, la victimización criminal, la psicología penitenciaria y policial, así como las estrategias de prevención del delito en sus distintos niveles. La asignatura fomenta competencias en análisis psicológico aplicado, evaluación pericial, intervención psicosocial y trabajo en equipo, integrando teoría y práctica en el ámbito criminológico. La evaluación continua incluye exámenes o dossieres (60%), prácticas y trabajos (30%) y actividades complementarias (10%), favoreciendo una formación rigurosa, aplicada y orientada a la prevención.

Analiza el marco jurídico que regula la seguridad como servicio público esencial y su interacción con la iniciativa privada, ofreciendo una visión integral del sistema de seguridad en España. El alumnado estudia los principios constitucionales, la organización de las fuerzas y cuerpos de seguridad, los límites legales de su actuación y la relación entre seguridad, libertad y derechos fundamentales. La materia aborda también la responsabilidad patrimonial de la Administración y el régimen jurídico de la seguridad privada, con especial atención a la normativa, competencias y funciones de los distintos actores implicados. Se fomenta el desarrollo de competencias analíticas, interpretativas y críticas aplicadas al ámbito de la gestión y regulación de la seguridad pública y privada. La evaluación continua combina trabajos prácticos y actividades complementarias (40%) con una prueba teórica final (60%), garantizando una formación sólida y actualizada en el marco legal de la Criminología y la seguridad.

Integra el estudio de las directrices políticas, sociales y jurídicas que determinan la definición del delito y la respuesta del sistema penal, junto con el análisis de la figura de la víctima y los procesos de victimización. En su primera parte, se abordan los modelos de política criminal, la función del Derecho penal como control social y las tendencias actuales en materia legislativa y de seguridad, promoviendo una comprensión crítica del poder punitivo del Estado. En la segunda, se profundiza en la victimología como disciplina aplicada, examinando las formas de victimización, los derechos de las víctimas, los mecanismos de asistencia y reparación y las nuevas formas de justicia restaurativa y mediación penal. La materia desarrolla competencias en análisis jurídico-criminológico, investigación aplicada, comunicación y pensamiento crítico, esenciales para la práctica profesional. La evaluación continua se compone de exámenes (50%), trabajos (30%) y participación activa (10%), garantizando un aprendizaje reflexivo y comprometido con los valores de justicia y equidad.

Introduce los fundamentos teóricos y metodológicos del Derecho penal como instrumento esencial de protección de los bienes jurídicos y de garantía de los derechos fundamentales. El alumnado estudia los fines y límites del poder punitivo del Estado, los principios de legalidad, culpabilidad y proporcionalidad, y los elementos estructurales de la teoría jurídica del delito: acción, tipicidad, antijuridicidad, culpabilidad, iter criminis, autoría y participación. Asimismo, se examinan las causas de justificación, circunstancias modificativas, concurso de delitos y determinación de la pena, proporcionando una base sólida para asignaturas posteriores como Derecho Penal Especial. La asignatura potencia competencias de análisis jurídico, argumentación, razonamiento crítico y aplicación práctica del derecho. La evaluación continua incluye examen final (60%), casos prácticos y cuestionarios (30%) y actividades complementarias (10%), promoviendo un aprendizaje riguroso y orientado a la práctica profesional en el ámbito jurídico y criminológico.

Orienta el aprendizaje del inglés aplicado a la Criminología y al Derecho, desarrollando las competencias lingüísticas necesarias para desenvolverse en contextos académicos y profesionales internacionales. A través de un enfoque comunicativo, se refuerzan las destrezas de comprensión y expresión oral y escrita, así como el dominio de la gramática y el vocabulario especializado en áreas como el delito, la violencia, la cibercriminalidad y el Derecho penal y civil. El objetivo es alcanzar un nivel B2 del Marco Común Europeo de Referencia, garantizando una comunicación eficaz y precisa en entornos jurídicos y criminológicos. Se fomenta además la autonomía en el aprendizaje, la competencia intercultural y la capacidad de trabajo en entornos multilingües. La evaluación continua pondera pruebas escritas y orales (40%), trabajos y actividades prácticas (40%) y participación en actividades complementarias (20%), asegurando un progreso equilibrado en todas las competencias lingüísticas.

Con un enfoque práctico y científico, el programa de Criminalística ofrece una formación completa en las principales técnicas de investigación, descubrimiento y verificación forense del hecho delictivo. El alumnado aprende a realizar la inspección ocular, la recogida y custodia de muestras, así como la elaboración y defensa del acta de Inspección Ocular ante la autoridad judicial. A través de un temario estructurado en cuatro bloques —Criminalística, Ciencias Forenses, Tecnologías Forenses e Introducción al área— y actividades como prácticas de laboratorio en escenas simuladas, el curso desarrolla competencias en observación, análisis y aplicación de métodos científicos. La metodología combina clases teóricas, prácticas y tutorías personalizadas, con una carga de 180 horas (6 ECTS) y un sistema de evaluación continua que pondera por igual exámenes tipo test y trabajos aplicados. Este enfoque integral fomenta el rigor técnico, la ética profesional y la capacidad de intervención eficaz en contextos reales de investigación forense.

Con un enfoque interdisciplinar entre Medicina y Derecho, Medicina Legal y Ciencias Forenses profundiza en los procedimientos médico-legales y periciales que sustentan la investigación científica de los hechos con relevancia jurídica. El programa abarca desde la tanatología y la patología forense hasta la psiquiatría, toxicología, pediatría y sexología forenses, incorporando también la identificación biológica y genética como herramienta clave de análisis. Mediante clases teóricas y seminarios prácticos centrados en casos reales, el alumnado adquiere competencias en diagnóstico médico-legal, valoración del daño y elaboración de informes periciales, integrando los principios éticos y deontológicos propios del ámbito judicial. Con una carga de 6 ECTS (180 horas) y una evaluación continua que equilibra teoría y práctica, la asignatura fomenta el pensamiento crítico, la precisión científica y la responsabilidad profesional en el ejercicio de la pericia forense.

Desde una perspectiva analítica y aplicada, Evaluación de programas y políticas públicas forma al alumnado en el uso de herramientas de investigación social aplicada para valorar la eficacia, impacto y coherencia de las acciones del Estado en materia de seguridad, justicia o reinserción social. El curso aborda las fases, métodos y modalidades de evaluación —desde la planificación y el seguimiento hasta la meta evaluación y el análisis del impacto—, integrando los marcos normativos actuales como la Ley 27/2022 de institucionalización de la evaluación de políticas públicas. A través de clases teóricas, ejercicios de aplicación y un proyecto grupal de evaluación de un programa real, se desarrollan competencias en análisis crítico, diseño de instrumentos y comunicación de resultados. Con una dedicación total de 6 ECTS (180 horas) y evaluación continua equilibrada entre pruebas teóricas y trabajo práctico, esta materia impulsa una visión estratégica y responsable de la acción pública en el ámbito criminológico.

Con una sólida orientación práctica, Derecho procesal penal profundiza en las normas, principios y fases del proceso penal que garantizan el ejercicio legítimo del ius puniendi del Estado y la tutela efectiva de los derechos fundamentales. El programa aborda el estudio de la jurisdicción y competencia de los tribunales, las partes procesales, los actos de investigación, el juicio oral y la ejecución de sentencias, incluyendo los procedimientos especiales y la valoración de la prueba. A través de clases teórico-prácticas, análisis de sentencias y resolución de casos reales, el alumnado desarrolla competencias en interpretación jurídica, argumentación y aplicación procesal. Con una dedicación total de 6 ECTS (180 horas) y evaluación continua basada en un 60 % de examen y un 40 % de actividades prácticas, la materia promueve una comprensión integral del proceso penal como pilar esencial de la justicia y la seguridad jurídica.

Con una orientación práctica y humanista, Derecho penitenciario profundiza en el marco jurídico que regula la ejecución de las penas y medidas de seguridad, garantizando los derechos fundamentales de las personas privadas de libertad y su reinserción social. El programa aborda el funcionamiento del sistema penitenciario español, los regímenes y grados de clasificación, las medidas de seguridad, la convivencia intramuros, la intervención de la víctima y el control judicial de la actividad penitenciaria. A través de clases teóricas, análisis de casos y metodologías innovadoras —como la gamificación y el aprendizaje cooperativo—, el alumnado desarrolla competencias para diseñar estrategias de tratamiento y reinserción adaptadas a distintos contextos. Con una carga de 6 ECTS (180 horas) y evaluación continua basada en pruebas teórico-prácticas y participación activa, esta materia fomenta el compromiso ético, la sensibilidad social y la comprensión crítica del sistema penal y su función resocializadora.

Con una perspectiva práctica y restaurativa, esta materia prepara al alumnado para aplicar métodos alternativos de solución de conflictos (MASC) —como la negociación, la mediación o el arbitraje— en contextos judiciales y extrajudiciales. Promueve una visión humanista de la justicia basada en la comunicación, la empatía y la reparación, orientando al futuro criminólogo hacia modelos de justicia restaurativa y prevención de conductas delictivas. A través de talleres, juegos de rol y análisis de casos, se desarrollan habilidades en gestión emocional, liderazgo colaborativo y mediación penal o penitenciaria. Con una carga de 6 ECTS y un sistema de evaluación continua que combina teoría, práctica y participación activa, impulsa una formación integral en la gestión pacífica de los conflictos y en la construcción de acuerdos eficaces y éticamente responsables.

Con un enfoque analítico y comprometido, esta materia profundiza en los fundamentos del Estado del Bienestar y su relación con los derechos sociales, la pobreza y la exclusión, abordando su impacto en la criminalidad y la cohesión social. El programa desarrolla la capacidad de identificar factores de vulnerabilidad, desigualdad y victimización, así como de diseñar estrategias de inclusión y reinserción desde la perspectiva criminológica. A través del estudio de políticas públicas, análisis de datos y casos prácticos, el alumnado adquiere competencias para evaluar medidas sociales y comprender el papel del criminólogo en la gestión de programas de inclusión y prevención. Con una carga de 6 ECTS y evaluación continua basada en pruebas teóricas, trabajos aplicados y participación activa, fomenta una visión ética, crítica y orientada al bienestar colectivo.

Con un enfoque aplicado y orientado a la investigación, esta materia desarrolla las competencias necesarias para el tratamiento estadístico y el análisis cuantitativo de la información en el ámbito criminológico y social. A través del estudio de los principios de la estadística descriptiva, la probabilidad y la inferencia, el alumnado aprende a recopilar, organizar e interpretar datos con precisión científica. Se trabajan herramientas como regresión, correlación y distribución de variables, aplicadas a la detección de patrones y la toma de decisiones basadas en evidencia. Mediante clases teórico-prácticas, resolución de ejercicios y uso de recursos digitales, la asignatura impulsa el pensamiento analítico, el rigor metodológico y la capacidad de gestión de información, fundamentales para la práctica profesional en Criminología.

Con una visión integral del sistema político-administrativo, esta materia ofrece una comprensión profunda del entramado institucional público español y europeo y de su papel en la gestión de la seguridad, la delincuencia y la atención a las víctimas. El alumnado aprende a identificar y analizar el funcionamiento de la administración pública, las relaciones intergubernamentales y la interacción entre los distintos niveles de gobierno —estatal, autonómico, local y europeo—. A través del estudio de casos, debates y análisis normativos, se fomenta una capacidad crítica ante las decisiones de los agentes públicos y privados, así como una visión ética y colaborativa del servicio público. Con una carga de 6 ECTS y evaluación continua basada en pruebas teóricas, prácticas y participación activa, impulsa el desarrollo de competencias estratégicas para la comprensión y mejora de las políticas públicas.

Con un enfoque técnico y aplicado, esta materia profundiza en el estudio de los delitos tipificados en la Parte Especial del Código Penal, integrando los conocimientos adquiridos en la Parte General para su aplicación práctica en casos concretos. A través del análisis sistemático de los delitos contra la vida, la libertad, la integridad física, el patrimonio o la administración pública, el alumnado aprende a identificar los elementos del tipo penal, interpretar la norma y determinar la responsabilidad penal correspondiente. La metodología combina clases teóricas, resolución de casos prácticos, análisis jurisprudencial y debates jurídicos, fomentando la argumentación y el razonamiento crítico. Con una dedicación total de 6 ECTS y evaluación continua basada en exámenes, prácticas y participación activa, promueve el rigor jurídico, la capacidad analítica y la competencia profesional necesaria para la interpretación y aplicación del Derecho penal en el ámbito criminológico.

Orientadas a la inserción profesional, las prácticas externas permiten aplicar los conocimientos teóricos adquiridos a contextos reales de trabajo en el ámbito criminológico, jurídico o social. Su finalidad es consolidar la formación integral y las competencias profesionales mediante la participación activa en instituciones, organismos públicos o entidades privadas relacionadas con la seguridad, la justicia y la prevención. Durante el periodo de prácticas, el alumnado desarrolla capacidades de análisis, decisión, trabajo en equipo y ética profesional, elaborando informes intermedios y una memoria final supervisada por tutores académicos y profesionales. Con una carga de 24 ECTS (520 horas) distribuidas a lo largo del curso, esta experiencia fomenta la autonomía, la responsabilidad y la preparación para una incorporación cualificada al mercado laboral.

Etapa culminante del itinerario formativo, el Trabajo Fin de Grado representa la síntesis de los conocimientos, competencias y habilidades adquiridas a lo largo del programa de Criminología. Bajo la supervisión de un tutor, el estudiante desarrolla un proyecto, memoria o estudio original que aplica métodos de investigación, análisis crítico y argumentación académica a una temática de relevancia social, jurídica o científica. La elaboración del trabajo fomenta la autonomía, el pensamiento reflexivo y la capacidad de comunicación académica, tanto escrita como oral, mediante la redacción y defensa pública del proyecto. Con una carga de 6 ECTS (180 horas) y un seguimiento personalizado, esta asignatura impulsa la madurez investigadora y la proyección profesional del futuro criminólogo.

Este módulo promueve una formación universitaria integral al reconocer la participación activa del alumnado en actividades culturales, deportivas, solidarias y de cooperación, complementarias a su desarrollo académico. Permite obtener hasta 6 créditos ECTS mediante la implicación en experiencias que refuerzan valores como la responsabilidad social, la cooperación, el liderazgo y la empleabilidad. Entre las acciones reconocibles se incluyen la asistencia a jornadas y congresos, la representación estudiantil, el voluntariado, el aprendizaje de idiomas o la participación en proyectos institucionales. De carácter transversal, esta asignatura fomenta la implicación cívica y el compromiso ético del estudiante, consolidando su desarrollo personal y profesional más allá del aula.

Con una perspectiva global y analítica, esta materia aborda los principios, fuentes y mecanismos del Derecho penal internacional, orientados a la persecución y sanción de los crímenes más graves que afectan a la comunidad internacional. El programa examina los crímenes de genocidio, guerra, lesa humanidad y agresión, así como la función de los tribunales internacionales y la cooperación judicial entre Estados. A través del estudio de casos reales, debates y análisis jurisprudencial, el alumnado desarrolla competencias en razonamiento jurídico, interpretación normativa y argumentación crítica. Con una carga de 6 ECTS y evaluación continua basada en trabajos, exámenes y participación activa, fomenta una comprensión profunda de la justicia penal internacional y su papel en la protección de los derechos humanos y el orden global.

Desde una perspectiva jurídica y práctica, esta materia capacita al alumnado para comprender el sistema de prevención de riesgos laborales y su integración en la organización empresarial. Analiza los derechos y obligaciones del empresario y del trabajador en materia de seguridad y salud, abordando los ámbitos administrativo, penal, civil y de la Seguridad Social. El programa incluye el estudio del marco normativo nacional e internacional, la gestión preventiva en la empresa, la responsabilidad por incumplimiento y la participación de los trabajadores en la prevención. A través de clases magistrales, resolución de casos y prácticas aplicadas, fomenta el desarrollo de competencias en análisis jurídico, responsabilidad social y cultura preventiva, esenciales para el ejercicio profesional en entornos laborales seguros y éticos.

Desde una perspectiva interdisciplinar y criminológica, esta materia ofrece un análisis profundo de los fenómenos del terrorismo y la delincuencia organizada, así como de sus interconexiones a escala nacional e internacional. Examina los procesos de radicalización violenta, las motivaciones individuales y los mecanismos de desradicalización, junto con el estudio de los principales modelos de políticas y estrategias antiterroristas. Asimismo, aborda la estructura, evolución y redes del crimen organizado, prestando especial atención a su dimensión transnacional y a su impacto en la seguridad europea y española. A través de lecturas críticas, análisis de casos, seminarios y debates, el alumnado desarrolla competencias en interpretación social, pensamiento crítico y diseño de estrategias preventivas, integrando el conocimiento teórico con la aplicación práctica propia de la criminología contemporánea.

Con una mirada crítica y multidisciplinar, esta materia profundiza en el origen, causas y manifestaciones de la violencia contra las mujeres, abordando tanto su dimensión histórica y social como su tratamiento jurídico y criminológico. Analiza los mecanismos de legitimación y deslegitimación de la violencia a lo largo del tiempo, los discursos que la sustentan y el papel del feminismo en su erradicación. El programa incluye el estudio de la legislación penal, las políticas públicas y las estrategias de prevención e intervención, con especial atención a la Ley Integral contra la Violencia de Género y a la protección de víctimas y menores. A través de debates, análisis de casos y prácticas aplicadas, el alumnado desarrolla competencias en análisis crítico, sensibilización social y diseño de medidas preventivas, esenciales para la comprensión y transformación de las dinámicas de violencia de género en la sociedad actual.

Con un enfoque psicológico y criminológico, esta materia analiza los factores personales, sociales y emocionales que originan la agresividad y los comportamientos antisociales durante la infancia y la adolescencia. A través del estudio de la psicología del desarrollo, las variables de riesgo y protección y las dinámicas grupales y familiares, el alumnado aprende a interpretar los procesos que conducen a la violencia juvenil y a diseñar estrategias de prevención e intervención psicosocial. El programa combina el análisis teórico con la aplicación práctica en casos de acoso escolar, violencia filioparental, conductas delictivas y uso problemático de las tecnologías. Mediante clases participativas, trabajos de campo y estudios de caso, se promueve la reflexión crítica y el desarrollo de competencias para la detección temprana y la intervención educativa y social frente a las conductas antisociales.